Yo tengo que esconderme en alguna habitación para poder comer según qué cosas. Y es que no les hace falta oir abrir una lata, o la nevera, o el crujir de una bolsa... a veces voy en silencio pero, si alguno ve lo que llevo en las manos, parece que corre la voz y vienen unos cuantos a ver qué pueden atrapar, jajaja.
Era parecido con mi perrita, sólo que ella se sentaba en silencio observando con cara de pobrecita de mí, no te olvides de darme el vasito después. Mi gatita es más pesada, te engancha directamente la manga para que le des, menos mal que es super-enana y debilucha, es como tener un mosquito tirando del brazo. Encima, cuando le das, lo olisquea un poco y lo deja, muy estirada y remilgada, con cara de menuda porquería me has dado.
La nena es capaz de subirse en mi y meter su carita entre el vasito de yogurt y mi boca, o sujetarme con las garras para que no me pueda ir sin que ella lo diga.
Mi gata esperaba sentada mirandome mientras yo me comía el yogur, porque sabía que cuando yo acabara, le ofrecería el envase para que ella metiera le lengua y lo terminara de limpiar
je, je... ¡son tan rápidos! ya pueden estar en la otra punta del piso, que en cuanto abres la nevera vienen corriendo!
ResponderEliminarYo creo que lo del teletransporte en la series de CiFi está inspirado en nuestros queridos mininos XD
ResponderEliminarA mi me pasa con el paté, es olerlo cuando abro la latita o el tarrito y... aleh, Nikkita en modo persecución y acoso Ux__D
ResponderEliminarYo tengo que esconderme en alguna habitación para poder comer según qué cosas. Y es que no les hace falta oir abrir una lata, o la nevera, o el crujir de una bolsa... a veces voy en silencio pero, si alguno ve lo que llevo en las manos, parece que corre la voz y vienen unos cuantos a ver qué pueden atrapar, jajaja.
ResponderEliminarEra parecido con mi perrita, sólo que ella se sentaba en silencio observando con cara de pobrecita de mí, no te olvides de darme el vasito después.
ResponderEliminarMi gatita es más pesada, te engancha directamente la manga para que le des, menos mal que es super-enana y debilucha, es como tener un mosquito tirando del brazo. Encima, cuando le das, lo olisquea un poco y lo deja, muy estirada y remilgada, con cara de menuda porquería me has dado.
La nena es capaz de subirse en mi y meter su carita entre el vasito de yogurt y mi boca, o sujetarme con las garras para que no me pueda ir sin que ella lo diga.
ResponderEliminarEn casa eso solo pasa con el pollo o cuando tienen hambre, por suerte los tres son tranquilos en ese sentido... el problema lo tengo con mi esposo!!!
ResponderEliminarMi gata esperaba sentada mirandome mientras yo me comía el yogur, porque sabía que cuando yo acabara, le ofrecería el envase para que ella metiera le lengua y lo terminara de limpiar
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